En la enseñanza-aprendizaje de la lectoescritura se pueden distinguir
tres fases de preparación (la tradicionalmente denominada como "madurez
para") de aprendizaje propiamente dicho y de consolidación o
automatización.
Efectivamente, con la práctica los procesos de bajo nivel se
automatizan y es cada vez más posible que los procesos de decodificación y lo
de comprensión actúen en paralelo, esto explicaría la diferencia entre la
lectoescritua y ardua y difícil de los principiante sy la ejecución fluida de los
hábiles donde los procesos de bajo nivel ya están automatizados.
Laberge y Samuels (1977) establecen tres fases para el desarrollo para
la automaticidad en el procesamiento de las palabras.
a. Etapa de no adecuación: Se dan muchos errores en el reconocimiento de
las palabras.
b. Etapa de adecuación: Se reconocen correctamente las palabras pero con
un gran esfuerzo de atención
c. Etapa automática: El reconocimiento se realiza sin necesidad de
atención.