En la
actualidad, al hablar de educación especial, aún implica cierto rechazo tanto
al nombre como a las personas involucradas; y esto sigue ocurriendo a pesar de
que se menciona una inclusión. Se ha olvidado que todos tenemos derechos, todas
las personas somos partícipes dentro de la educación.
Y es que al
referirnos a una educación inclusiva, se refiere a una igualdad y equidad, a un
entendimiento y reconocimiento de que todas las personas son diferentes.
Lamentablemente estamos en una sociedad que discrimina, todo lo que considera
totalmente opuesta a ella; se deja de lado también la importancia de la
interacción entre sujeto y el entorno, por tanto no se lleva una verdadera
inclusión para las personas con necesidades especiales.
En este
caso, cabe mencionar que dentro de las necesidades educativas especiales se
encuentra la adquisición de habilidades básicas tales como la lectura y
escritura y los problemas que se presentan son diversos. Este tema es
relevante, tanto a nivel individual, como social, de igual manera para las
personas interesadas en el ámbito educativo y por su puesto para las familias.